Miércoles 20 de junio de 2012.– Marcel Koller se hizo cargo de la selección austriaca en noviembre de 2011. La prensa y algunos expertos no ocultaron sus dudas al principio, pero, siete meses después, ha quedado claro que el Presidente de la Asociación Austriaca de Fútbol, Leo Windtner, acertó en su decisión. Ha sido un técnico suizo quien ha devuelto a Austria a la senda de la victoria después de que el combinado del país alpino fracasase en su intento de clasificarse para la Eurocopa 2012.
Con su ascenso de la 73ª a la 58ª plaza, el combinado austriaco, tercero en la Copa Mundial de la FIFA 1954, ha alcanzado este mes su mejor posición desde que se creó la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola. Este salto de 15 puestos convierte a Austria en el cuarto equipo que más posiciones ha escalado en junio de 2012. Solo Benín (52 puestos), República Centroafricana y Nueva Zelanda (30 cada uno) avanzaron más que el combinado centroeuropeo.
El trabajo de Koller es la principal causa del ascenso de Austria. En noviembre, después de un paréntesis de más de dos años, el que fuera entrenador del Colonia y del Bochum decidió aceptar el reto de tomar las riendas de la selección austriaca a pesar de que sabía que las expectativas serían muy altas.
Tras dos semanas en el cargo, Koller se estrenó como seleccionador austriaco frente a Ucrania, coanfitrión de la Eurocopa 2012. El conjunto alpino cayó por un ajustado 2-1, pero ya entonces se puso de manifiesto que el equipo había experimentado un cambio importante.
Desde aquella derrota, Austria no ha vuelto a perder ningún partido. A finales de febrero, el combinado austriaco se impuso a Finlandia por 3-1, mientras que a principios de junio se tomó la revancha con Ucrania y la derrotó por 3-2. “Esta victoria es muy importante, porque el equipo ha comprobado que el trabajo vale la pena. Sin embargo, es igualmente importante no dar un valor excesivo a este triunfo”, declaró Koller, mezclando alabanzas con una advertencia a sus pupilos. El empate a 0-0 logrado contra Rumanía, 52ª clasificada en el escalafón mundial, unos días más tarde también fue un buen resultado para el joven plantel que dirige el entrenador helvético.
Koller sabe que el trabajo con sus jugadores debe ser gradual, y por eso definió sus ambiciones ante la Asociación Austriaca de Fútbol con las siguientes palabras: “Es como un brote que hay que ir regando poco a poco”. Por el momento, las condiciones parecen óptimas para el brote de Koller, ya que la selección austriaca va por buen camino. Con 524 puntos, el conjunto alpino está a un paso de meterse entre las 30 mejores selecciones de Europa (31º).
Alaba y Arnautovic toman la palabra
Además de Koller, algunos jugadores han desempeñado un papel especialmente importante en los recientes éxitos de Austria. David Alaba, o la “joya del fútbol austriaco”, como lo definió en su día el ex internacional Andreas Herzog, asume cada vez más responsabilidad con su selección. El polivalente zaguero del Bayern de Múnich es uno de los mayores talentos de Austria y en 2011 se convirtió en el jugador más joven que recibe el premio de mejor jugador del año en este país. “Da gusto verlo jugar. Alaba se desenvuelve como pez en el agua en el centro del campo. Esa es su posición, justo donde se cocina todo. Es joven, dinámico y ambicioso”, elogió Koller en alusión al joven internacional de 19 años.
La Asociación Austriaca de Fútbol también ha depositado grandes esperanzas en el “enfant terrible” Marko Arnautovic, que en la victoria por 3-2 sobre Ucrania desniveló el duelo con un auténtico golazo. No obstante, el seleccionador también quiso ser cauto con el delantero del Werder Bremen. “Estoy convencido de que Austria no tiene muchos jugadores con tantas cualidades”, afirma el suizo, que inmediatamente añade: “Lo critico, pero no en público. No está al cien por cien y necesita ponerse a punto”.
Exactamente lo mismo que la selección austriaca, cuyo próximo gran objetivo es la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014™. Hasta el duelo contra Alemania que en septiembre abrirá la participación de Austria en la fase de clasificación mundialista, Koller tiene todavía varios meses para sacar el máximo rendimiento de su equipo. Los primeros pasos ya están dados. Ahora les corresponde a todos los implicados remar en la misma dirección para seguir mejorando y alcanzar el éxito.
*Con información de la FIFA
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