Viernes 16 de marzo de 2012.– “Al cabo de la paciencia, está el cielo”, reza un proverbio africano, y no le falta razón. Visiblemente, el marroquí Younes Belhanda conoce bien la máxima, y parece decidido a aplicarla a la hora de sacar conclusiones de la CAN 2012. Los Leones del Atlas no hicieron un buen campeonato y, para el centrocampista ofensivo del Montpellier, lo mejor que se puede hacer ahora es dar tiempo al tiempo.
“Hay que dejarnos crecer juntos. El seleccionador creó un grupo cuando llegó hace un año. Lo que hay que hacer es no acosarle y dejarle trabajar”, sostuvo Belhanda a FIFA.com. Para el joven internacional de 22 años, los motivos del fracaso en la pasada Copa Africana de Naciones giran en torno a un exceso de confianza. Y no duda en entonar el mea culpa antes de afrontar el futuro inmediato.
Falta de madurez
“Acudimos a la CAN demasiado seguros de nosotros mismos, como si los buenos resultados previos nos diesen derecho a aspirar a la final con un talante despreocupado e iluso”, consideró. “En este tipo de competiciones, si mentalmente no se adopta una actitud adecuada, resulta difícil triunfar. En una CAN se juega un fútbol distinto al de Europa, y nos negamos a aceptar esa premisa. Quisimos jugar al estilo europeo. Fue un error táctico y mental, pero también una falta de madurez”, nos explicó la sensación de la liga francesa con el conjunto sureño.
Belhanda, al igual que Youssouf Hadji, Marouane Chamakh y Houssine Kharja, no jugó el amistoso contra Burkina Faso del 29 de febrero, saldado con victoria por 2-0, pero pudo constatar cómo su seleccionador, Eric Gerets, sacaba de inicio a siete nuevos titulares. Nada anormal para un encuentro de prueba y en el que se vuelve a partir de cero, pero no deja de ser una muestra de que, tras el batacazo de la CAN, el técnico belga meditó largo y tendido sobre sus causas. “También debemos tener en cuenta que nuestro juego es puramente técnico. Por tanto, vamos a tratar de introducir un poco de físico, intentando encontrar jugadores que puedan encajar en ese perfil”, comentaba Gerets el pasado mes en el diario Le Matin. “Nos hace falta combinar mejor el aspecto técnico y el físico”.
“Hemos encontrado nuestra identidad con la fuerza de nuestro colectivo, pero hay que añadirle una mayor lucha física a nuestro juego”, confirmó a FIFA.com el alabado centrocampista del Montpellier, que debutó con su selección en noviembre de 2010 frente a Irlanda del Norte. “Hay que encontrar el término medio y el equilibrio idóneo entre esa necesidad física y nuestras virtudes técnicas”, prosiguió antes de defender a su entrenador, al que la Asociación Marroquí de Fútbol mantuvo en el cargo con la misión de clasificar a los magrebíes para la CAN de Sudáfrica 2013.
Sin lugar para los lamentos
“No hay que cargarlo todo sobre la espalda del seleccionador. Comprendo las críticas, pero a veces son demasiado duras”, opinó Belhanda, quien, a su vez, logró escapar de esas críticas tras sus actuaciones individuales en Gabón y Guinea Ecuatorial, relativamente buenas. “El entrenador es nuevo en el fútbol africano, pero tiene experiencia suficiente para haber aprendido de esta decepción. Hay que dejarle trabajar. La gente y la prensa están decepcionadas, pero nosotros también lo estamos. Fuimos allí para ganar, y el golpe fue difícil de encajar. Pero hay que dejar a un lado este fracaso; no hay lugar para los remordimientos ni los lamentos”, destacó el marroquí, que ocupó la posición de cerebro en la CAN, dentro de una plantilla bastante joven. “La mayoría de los jugadores de la plantilla han sido internacionales menos de 10 veces, no hay que olvidarlo”, recordó.
En Gambia, el 1 de junio, y frente a Costa de Marfil, ocho días después, los Leones del Atlas empiezan ya a jugar fuerte en los dos primeros partidos del Grupo C, correspondiente a la segunda ronda de la fase de clasificación africana para la Copa Mundial de la FIFA Brasil 2014. Un mal comienzo, y la presión sobre los hombros de los marroquíes será enorme. Pero para Belhanda, no tiene sentido dejarse llevar por el pánico: Marruecos simplemente necesita tiempo.
Y como dijo el profeta Mahoma: “la paciencia es la clave del bienestar”. Un bienestar que podría alcanzarse en la CAN 2013 y en la Copa Mundial de la FIFA 2014…
*Con información de la FIFA
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