Viernes 9 de marzo de 2012.– Islas Salomón fue la primera selección en clasificarse por méritos propios para la Copa Mundial de Fustal de la FIFA Tailandia 2012, y como tal, se puso prontamente manos a la obra. Los Kurukurus ansían dejar atrás aquel desafortunado estreno de Brasil 2008, cuando perdieron los cuatro partidos que jugaron y sufrieron 69 goles en contra.
En pos de ese objetivo, los salomonenses aceptaron con gusto la colaboración de una las potencias de la especialidad, España, dos veces campeona mundial y subcampeona vigente. La ayuda se cristalizó en una clínica de cuatro días dictada por su entrenador Venancio López, quien conduce a la Furia Roja desde 2007.
“Mi participación se dio en el marco del convenio que existe la Real Federación Española de Fútbol y la Confederación Oceánica, un acuerdo que abarca incluso el fútbol femenino y el futsal de toda la región”, explica a FIFA.com el técnico de 47 años. “Y debo confesar que me he llevado una gratísima sorpresa”, agrega rápidamente.
“En lo organizativo todo es mejorable, ¡si apenas tienen un pabellón en todas las islas!”, comenta López. “En lo futbolístico, sin embargo, sus cualidades innatas son sorprendentes. Durante las jornadas, que fueron a doble turno, demostraron un talento excepcional para el fútbol en general y el futsal en particular. Además de calidad técnica, cuentan con una forma física privilegiada. O sea, tienen potencialmente lo necesario para hacer un buen Mundial”.
Lo escuchamos atentamente porque él nos podía dar lo necesario para lograr nuestros objetivos. No deseamos solamente ir al Mundial: queremos competir.
Elliot Ragomo, capitán de Islas Salomón
Aspectos a mejorar
Islas Salomón mostró poder de ataque durante el clasificatorio, ganando sus cinco compromisos con una media de 9,8 goles por partido. Su problema, destaca López, es otro. “Está claro que necesitan ayuda en el aspecto táctico, sobre todo en defensa, que es donde mostraron mayores falencias. Sería importante que incorporaran a algún especialista para mejorar esa zona”, analiza.
Los Kurukurus padecieron dos derrotas dolorosas en aquel Mundial de 2008, un 21-0 con la luego campeona Brasil, y un 31-2 con la posteriormente semifinalista Rusia, el resultado más abultado en la historia del torneo. “Estoy seguro que eso no volverá a pasarles”, afirma López con convicción. “Casi todos los jugadores que fueron a Brasil con 16 años siguen en el equipo, así que llegarán a Tailandia más curtidos. Y, claro está, con una media de 20 años les veo un potencial ilimitado de cara al futuro”, agrega.
López destacó individualmente a tres veteranos de 2008, Elliot Ragomo, Jack Wetney y Micah Lea’alafa. Ragomo, como capitán del equipo, elogió la clínica. "Esta es una oportunidad única para cualquiera, porque López es uno de los mejores entrenadores del mundo. Lo escuchamos atentamente porque él nos podía dar lo necesario para lograr nuestros objetivos. No deseamos solamente ir al Mundial: queremos competir”.
¿Qué se pude esperar de ellos en Tailandia, entonces? López concluye con una cuota de realismo: “Evidentemente no están para ser campeones, pero sí pueden dar alguna sorpresa. Llegarán en un nivel similar al de varios países que clasificarán al Mundial. De hecho, podrían ganar algún partido y hasta quizás entrar en la siguiente fase”.
*Con información de la FIFA
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