Martes 6 de marzo de 2012.– Después de tres temporadas infructuosas, Jean-Michel Aulas, presidente del Olympique de Lyon, decidió redistribuir las cartas en el seno de su club. “Necesitamos apoyarnos en los valores internos para revitalizarnos. Tenemos demasiados jugadores consagrados con relación a la cantidad de jóvenes con talento”, anunció en la pretemporada 2011/12. Así, para volver a convertir al conjunto lionés en el rey de la baraja francesa que fue de 2002 a 2008, confió las riendas del equipo a Rémi Garde, responsable de la cantera, e intentó una jugada maestra apostando por la juventud de su plantilla.
“Todavía no se puede decir hoy que esa apuesta se haya ganado, porque para eso haría falta que ganásemos la Liga de Campeones”, analizó Alexandre Lacazette, de 20 años, a FIFA.com. “Pero creo que los jóvenes están a la altura de la confianza que se ha depositado en ellos. Tengo la sensación de que estamos causando una impresión bastante buena desde el comienzo de la temporada”. El delantero lionés es, en cualquier caso, una de las mejores bazas que presenta la cantera del conjunto del Ródano.
Gatillo fácil
Con su espléndido rendimiento en la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA Colombia 2011, Lacazette ayudó a ganar unas cuantas batallas a una selección de Francia que disponía de 7 jugadores del OL, nada más y nada menos. “¡No todo el mundo tiene la suerte de jugar un Mundial en su carrera! Evidentemente, nos habría gustado haber pasado de ese 4º puesto, pero yo guardo un recuerdo magnífico del campeonato”, admitió. Lacazette, Bota de Bronce adidas del certamen, fue el máximo artillero ex aequo con el brasileño Henrique y el español Álvaro Vázquez (5 goles), pese a no haber sido titular más que 1 vez en 7 partidos…
A su vez, el propio Rémy Garde (quien, según su discípulo, “conoce los valores del club tanto como los de sus jugadores”) iba a convertir a Lacazette en su comodín de lujo para esta temporada. Con 28 partidos disputados, 15 como titular, el delantero de ascendencia martiniquesa suma ya 7 dianas, 5 de ellas en lo que va de año. “Es un joven jugador que tiene la cabeza sobre los hombros, que trabaja bien y que está al servicio del equipo. Todavía no ha llegado su momento. Pero Alexandre tiene mucha calidad y, si sigue así, llegará muy lejos”, resaltó el técnico del Olympique de Lyon.
En realidad, Lacazette empezó a labrarse su condición de revulsivo mágico un poco antes. El vivaz y oportunista ariete marcó su primer tanto en octubre de 2010 en el campo del Sochaux, tras haber sustituido a Michel Bastos. Ese mismo año, solamente esperó a su segundo partido de Liga de Campeones para estrenar su casillero en Europa frente al Hapoel de Tel Aviv, después de haber reemplazado a Miralem Pjanic. “Yo tomo lo que me dan”, precisó el oportuno delantero. “A uno le gustaría ser titular en todos los partidos, pero soy joven y compito con muchos grandes jugadores. De todas formas, estoy notando que el entrenador cada vez me hace salir más de inicio”. Aunque para ello tenga que prescindir de otros más experimentados...
Un póquer de ases y una pareja mágica
Así, frente al APOEL de Nicosia, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones de la UEFA, Garde prefirió a Lacazette para su once inicial en detrimento de Bafétimbi Gomis. A la postre, el internacional sub-21 anotaba el gol de la victoria por 1-0. “Mi trabajo y mis esfuerzos están dando fruto, pero no sólo eso. La confianza de mis compañeros y del cuerpo técnico también desempeñan un papel esencial en mis actuaciones”.
Junto a Maxime Gonalons (22 años), Samuel Umtiti (18 años), y Clément Grenier (21 años), entre otros, Lacazette integra un joven póquer de ases Made in Lyon especialmente entonado este año. Pero con quien realmente conforma una pareja mágica es con Grenier: “Llevamos muchos años jugando juntos y, sin necesidad de mirarle, sé dónde quiere recibir el balón”, explicó este último. “Es todo clase y elegancia, y goza de una gran calidad en el arte del pase. Es lo que se llama un magnífico jugador”, replicó Lacazette en relación a su colega centrocampista, con el que comparte la misma camiseta desde hace 15 años.
“El ambiente es muy bueno. El cambio en el banquillo, y el hecho de que muchos nos conozcamos desde hace mucho tiempo y seamos de la casa ayuda, sin duda”, concluyó Alexandre Lacazette. “Personalmente, me enorgullece muchísimo vestir la camiseta del club de la ciudad que me ha visto nacer y crecer. Toda mi familia y mis amigos viven en Lyon. Jugar en Gerland es mi sueño de la niñez. No me importaría permanecer toda mi carrera a orillas del Ródano”. Y no parece que el Lyon esté dispuesto a dejar marchar a su mejor baza en el futuro…
*Con información de la FIFA
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